Tema para la mejora: Prevención secundaria de la cardiopatía isquémica
 
 
¿Porqué es importante este tema?
El tratamiento combinado con antiagregantes, IECA (o ARA II), beta-bloqueantes y estatinas permitiría reducir en 2/3 los casos de nuevo infarto de miocardio en los 10 años siguientes a un infarto previo.
 
Sin tratamiento, 3 de cada 10 pacientes tendrán un nuevo infarto en ese periodo, por sólo 1 de cada 10 con el tratamiento combinado con los 4 fármacos.
 
 

 

 


 
Análisis del problema. Resultados de la Investigación
 
     
 
 
Los estudios realizados en el SNS sugieren que, pese a una importante mejora en los últimos años, existe una importante subutilización de estos tratamientos. En la Comunidad Valenciana, la información sobre el empleo de estos fármacos es muy escasa.
 
La combinación de los sistemas de información de la Agencia Valenciana de Salud utilizando el número SIP permite conocer la adherencia y persistencia a estos tratamientos en los pacientes que han sido dados de alta vivos tras un síndrome coronario agudo.
 

 
En este estudio se partió de los 8.504 pacientes dados de alta vivos tras una hospitalización por síndrome coronario (CMBD), que fueron seguidos durante 9 meses para identificar los posibles fallecimientos o traslados fuera de la Comunidad (SIP) y los tratamientos retirados de las farmacias (SIA-GAIA). 
 
Medida de resultados: retirar de las farmacias suficientes envases de cada uno de los fármacos para cubrir (con cada uno de los tratamientos y con la combinación de 3 o más tratamientos) el 75% del tiempo de seguimiento.
 
El promedio de tiempo de seguimiento con cobertura de tratamiento fue del 76,5% para los antiagregantes, 54,1% para los beta-bloqueantes, 56,0% para IECA (o ARA II) y 67,9% para las estatinas.
 
El porcentaje de pacientes que alcanzaron el 75% del tiempo de tratamiento fue del 69, 9%, 43,3%, 45,4% y 58,8% para antiagregantes, betabloqueantes, IECA/ARA y estatinas, respectivamente.  
 
El 47,6% de los pacientes alcanzó el 75% del tiempo con 3 o más tratamientos, pero el 18% no alcanzó este porcentaje con ninguno de los tratamientos.
 
En la figura se muestra la probabilidad de alcanzar el 75% de cobertura de tratamientos con 3 o más fármacos (o con ninguno) según el Departamento de Salud de residencia (Odds ratio ajustadas por las características de los pacientes.
 
 



     
 
Conclusiones
 
     
 
Pese a que los resultados de persistencia de los tratamientos son mejores que los de la mayor parte de estudios previos, también muestran que la proporción de pacientes con elevada adherencia es sub-óptima y que aún existe espacio para importantes mejoras en la calidad de la prevención secundaria de la cardiopatía isquémica.
 
Salvo para los antiagregantes (la aspirina se obtiene muchas veces sin receta) los resultados de este estudio muestran cifras de tratamiento comparables a los mejores resultados de los estudios publicados en España en los últimos 10 años, aunque las comparaciones son difíciles porque estos estudios valoran el estar tomando tratamiento en un momento dado (usualmente a los 6 meses) y no la persistencia del tratamiento a lo largo del tiempo.
Entre las áreas de mejora parece importante prestar atención a la importante variabilidad entre Departamentos de Salud.
 
     
     
 
Implicaciones para la gestión clínica y sanitaria 
 
     
 
- Pese a la mejora respecto a los estudios previos, la prevención secundaria de la cardiopatía es todavía mejorable en nuestra Comunidad. La implantación de indicadores a partir de estudios como el actual y su incorporación a los contratos de gestión podría ser una estrategia útil para mejorar en este terreno y reducir la mortalidad coronaria.
 
- La monitorización por Departamentos (incluso por zonas básicas de salud) puede orientar los esfuerzos de mejora hacia objetivos concretos.